El viernes 8 de febrero de 1664 la mezquita de Yeni Cami fue abierta al rezo de los creyentes. Las obras habían empezado 67 años atrás y fueron abandonadas y vueltas a retomar en una accidentada historia que finalizó con la inauguración de una mezquita que permanece en la retina de todos los visitantes a Estambul. No en vano, está ubicada a la entrada del Cuerno de Oro, frente al puente Galata y junto al Bazar de las Especias, en definitiva, uno de los lugares más visitados y fotografiados de la capital. El 8 de febrero de 2014, Yeni Cami cumplió, pues, 350 años.
Safiye Sultán era la madre del sultán Murad III y no está clara la razón de que eligiera una ubicación como aquella para levantar una nueva mezquita imperial. Tradicionalmente, se habían elegido lugares elevados que permitieran ver el edificio desde una gran distancia, pero aquella mezquita estaría situada junto al puerto de Eminönü, en la parte más baja de la ciudad antigua. Se dice que el objetivo era expandir el Islam, pues el barrio estaba habitado mayoritariamente por judíos.
Las obras fueron una pesadilla. El arquitecto Davut Aga, uno de los discípulos del gran Mimar Sinan, había elegido un diseño clásico, una gran cúpula sostenida por cuatro arcos. Pero su fallecimiento motivó que la construcción fuera continuada por Dalgiç Ahmet Aga, quien se tuvo que enfrentar a un suelo semipantanoso que difícilmente podía sostener los cimientos del edificio. Construyó arcos, puentes y diques para desecar el área, pero finalmente, la muerte del sultán y el ascenso de Ahmed I provocaron el abandono del proyecto seis años después de su inicio.
Durante 57 años, la estructura de la mezquita quedó en ruinas hasta que se declaró el pavoroso incendio de 1660 que ardió durante 49 horas destruyendo 80.000 hogares, 300 palacios y mansiones, 360 mezquitas y costó 4.000 vidas a lo largo de todo el centro histórico. Tras el suceso, Valide Hatice Turhan Sultan, la madre del entonces Sultán Mehmet IV, decidió finalizar la construcción. El nuevo arquitecto Mustafá Aga decidió retomar el diseño original y levantó un bello edificio en el que una cascada de 66 cúpulas desciende desde la gran cúpula central de 36 metros. La mezquita tiene un patio porticado y dos minaretes con tres balcones.
La Mezquita Nueva fue la última mezquita imperial que se construyó con su kulliye, un complejo de edificios que constaba de escuela, hospital, baños públicos y un bazar que es una de las pocas construcciones que han sobrevivido, el hoy famoso Bazar de las Especias. Junto a la Yeni Cami se encuentran las tumbas de cuatro sultanes y la de la madre de Mehmet IV y promotora del monumento.
El interior está decorado con bonitos azulejos de Iznik y también con mármol y oro. Los azulejos son de los colores tradicionales azul, rojo y verde. Por supuesto, encontraremos las tradicionales lámparas colgando del techo hasta cerca del suelo, numerosas ventanas con vidrieras y los tradicionales sellos caligráficos en la base de la cúpula.
Yeni Cami es una de las más bonitas mezquitas de la ciudad y difícilmente nos marcharemos de Estambul sin un foto de este edificio, que a pesar de no estar construida sobre una zona elevada, se sitúa en un lugar que todo turista visita.
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http://es.wikipedia.org/wiki/Mezquita_Nueva
http://www.greturviajes.com/viajes-a-turquia/blog-turquia/la-mezquita-nueva-de-estambul
http://www.hurriyetdailynews.com/eminonus-yeni-valide-sultan-mosque-celebrates-350th-anniversary.aspx?pageID=238&nID=62170&NewsCatID=438
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